El paquete chileno, es el nombre con que se conoce a esa forma de estafa en la cual intervienen algunos actores: el ó los estafadores, el señuelo o instrumento de la estafa y la víctimas.
El objetivo final del estafador es lograr que la victima le entregue algo de valor a cambio de una “ilusión óptica”. Un ejemplo de este mecanismo de estafa podría ser: Estas transitando por la acera de una calle desprevenidamente y de pronto a alguien se le cae algo que parece ser un fajo de billetes que ves simultáneamente, con otro que te dice que lo repartan , inmediatamente después entre varios te acorralan, de alguna manera te logran convencer de que les entregues tanto el dinero que tienes como otras cosas de valor a cambio de esa ilusión óptica que representa el paquete de billetes falso, percatando posteriormente que fuiste objeto de una estafa.
Existen muchas versiones de este tipo de estafa, mucho venezolanos pensamos que el llamado ¨Socialismos del Siglo XXI¨ constituye la versión política de esta modalidad, en donde el señuelo esta representado por la promesa de igualdad, justicia y bienestar social; la victima es el pueblo, en especial los sectores con mayores necesidades, y lo que tiene que entregar la victima a cambio de esa ilusión prometida es el voto, el apoyo incondicional. Hoy 14 años después gran parte de quienes creyeron en esa ilusión, caen en la cuenta de que han sido objeto de una estafa…
En días pasados tuve la oportunidad de leer un mensaje difundido en una de las redes sociales. Quien lo publicó es una persona muy conocida en el país desde hace muchos años, que se ha destacado en el ambiente político, el ser un profesional y desempeñarse en el campos de las estadísticas, seguramente le habrá hecho vivir algunas experiencias no muy agradables, de igual manera no me cabe la menor duda de que él, le ha hecho pasar un mal rato a más de uno y es que el ambiente político como el que hemos vivido en Venezuela desde hace algunos años nos mantiene como en una especié de vigilia permanente, pendientes de lo que se dice o se deja de decir y todo gira en torno a los mismo, la política. El mensaje en cuestión contenía algo más o menos como esto:
¨En política, lo importante no es lo que se ha hecho sino lo que la gente cree que se ha hecho¨
Ciertamente debo reconocer que en principio este mensaje me impacto, mi mente viajo por los postulado de los grandes filósofos que vieron y ven en la política algo altruista para quienes la ejercen como dirigentes e indispensable en el orden social para una convivencia armónica de los ciudadanos . ¿Qué dirían de un mensaje como ese?
confieso que inicialmente, el contenido del mensaje lo relacione de manera directa con quien lo publicaba, de forma apresura en mi mente se presento una interrogante ¿Cómo es posible que esta persona piense de esa manera?. Con el propósito de despejar mi duda y desahogar un poco el sentimiento generado por tal expresión, opte por comentar el mensaje por la misma vía increpándole mediante un mensaje con un contenido parecido a esto:
¨¿Debo entender que para usted la política es un nido de mentiras y mentirosos, de embaucados y embaucadores?¨
Esperé por un tiempo y la repuesta a mi comentario no llegó, lo cual lejos de hacer que me tranquilizara, solo me impulso a pensar más en el contenido del mismo. Siendo que no fue posible intercambiar opinión con quien origino tal inquietud, me tome un tiempo para analizar el contenido una y otra vez. Mientras reflexionaba me hacía consciente de lo mucho que se puede expresar en menos de 140 caracteres. Seguidamente transcurrieron por mi mente una serie de especulaciones sobre las razones que alguien podría tener para afirmar algo como eso, inclinándome finalmente por creer, que probablemente, lo expresado no era otra cosa que el resultado del análisis efectuado en el entorno, lo cual no necesariamente significa que sea compartido por quien lo expresa, siendo el autor del mensajes un alto ejecutivo de una empresa dedicada a las encuestas, le toca medir muy de cerca las reacciones que se producen en la sociedad, como consecuencia de las acciones de quienes tienen la responsabilidad del gobierno, así como de aquellos que sin ser gobierno mantienen una activa participación política desde la oposición. Desde esta perspectiva, únicamente tendríamos que poner entre comilla la parte de la afirmación ¨En política¨ toda vez, que se referiría a la forma en que algunos la ejercen y no un definición generalizada del concepto.
Para quienes no viven en Venezuela y, de alguna manera están al tanto del acontecer político del país, imagino que les será difícil entender cómo un gobierno al cual muchos calificamos como ineficiente, pueda mantener un nivel de aceptación como el que tiene luego de ejercer el poder durante 14 largos años.
Ciertamente para muchos que hemos vivido el antes, el durante y estamos viviendo el ahora tampoco nos ha sido nada fácil entender; esto solo es posible analizando el entorno y percatarse de el engaño en el que han vivido la mayor parte de quienes le han apoyado durante mas de una década.
En el antes nos encontramos que el Presidente-Candidato llega al poder en circunstancia muy difíciles para los venezolanos, siendo un país que depende mayormente de la renta petrolera se encuentra en ese momento histórico con un barril de petróleo a US$8,00 y una deuda de 39 911 millones de dólares, deuda que en su mayor parte fue adquirida para financiar inversiones que permitieran diversificar la economía y en consecuencia superar la dependencia del ingreso proveniente de la venta del petróleo.
Esta deuda data de mucho tiempo atrás y fue adquirida en función de la capacidad de pago que tenía el país en un momento dado como consecuencia del precio del petróleo, deuda esta que fue reestructurada en más de una oportunidad.
La última reestructuración se produjo en el año 1990, año en el cual el precio del barril de petróleo llegó US$ 40,00 para inmediatamente bajar en 1991 a US$ 20,00. Luego presenta variaciones entre 12 y 22 dólares para finalmente bajar a US$ 8,oo en el 98.
Tales incidencias dieron lugar a la intervención del Fondo Monetario Internacional(FMI), lo cual da lugar a la aplicación del llamado paquete económico, nombre con que se identifico a un conjunto medidas restrictivas que tienen con fin principal que el Estado pueda cumplir con el pago de la deuda.
La aplicación de estas mediada dejan muy poca capacidad de maniobra al estado presentándose como consecuencia el descontento social. Es en este contexto y con una diversidad de candidatos que se que se llega a las elecciones de 1998. El pueblo ve en el rostro de los candidatos postulados por los partidos tradicionales la marca del FMI, los responsables de la crisis que están viviendo. En esta contienda electoral se vislumbra en el último lugar un rostro nuevo.
En principio el resto de los candidatos le restan importancia, ellos aún no han entendido la dimensión de lo que se está viviendo ni lo que en este momento representan para la mayoría, no se han percatado que el pueblo los esta viendo como los responsables de la inseguridad, el desempleo, la ineficiencia de los servicios públicos, la inflación el control de cambio. Ellos están luchando por una posición de poder, ajenos en su totalidad al clamor popular.
El pueblo quiere un cambio, un rostro nuevo una nueva forma de hacer política, cansados del engaño buscan alguien en quien creerá, alguien que no les haya engañado antes.
Esto hace que el rostro que figuraba de último empieza a remontar, la gente parece haber olvidado que es un ex presidiario, han, de alguna manera, justificado el que haya intentado dar un golpe de estado y alterar el orden constitucional, consideran que, ya su falta fue saldada con el tiempo que estuvo en prisión.
La contienda continua, los candidatos de la hoy llamada cuarta republica empiezan a percatarse del avance sostenido por parte del ex teniente coronel, ello hace que empiecen a pensar en la posibilidad de una candidatura unitaria, entre tanto, con un discurso incendiario, colmado de un profundo mensaje de división y con la promesa de: acabar con la inseguridad, generar nuevas fuentes de empleo, resolver el problema de la deuda externa, eliminar el control de cambio y hacer de su mandato un gobierno del pueblo y para el pueblo, continua su ascenso a la cabeza de la contienda, cuando por fin los partidos tradicionales logran el consenso por una candidatura unitaria ya es tarde el otrora teniente coronel lograr vende lo que hoy, 14 años después podríamos llamar el paquete bolivariano.
En el transcurso, por razones exógenas, el gobierno, se inicia con buen pié, el precio del petróleo pasa de Us$8,00 a Us$ 16,00, el primer viraje a la promesa del nuevo mandatario es el tratamiento de la deuda externa. El tener una mayor capacidad de maniobra le permite comprometerse a cancelar hasta el ultimo centavo de la deuda. Tal decisión es muy bien recibida en el exterior, borrando algún tipo de duda que pudiera existir sobre el perfil del mandatario.
El país requiere la atención rápida en algunas áreas criticas, no obstante el nuevo gobernante considera que antes de atender esas necesidades es necesario continuar en el debate político y plantearle al país la eliminación del Congreso, -el cual podría ser un grillete en su proyecto- y plantear una Constituyente con el fin de llevar adelante una reforma a la Constitución, esto concluye con la aprobación por referéndum de una nueva Carta Magna, lo cual le otorga un nuevo piso político.
El precio del petróleo continua su ascenso y el régimen, que empieza a definirse como socialista, opta por la aplicación de una economía de reparto. De esta manera se decanta por la búsqueda de resultados inmediatos distanciándose así de trabajar en la solución de los problemas de fondo.
Con esta forma de hacer política logra de manera rápida que la presión social disminuya y a partir de ahí se inicia la construcción de un mecanismo que permita poner en práctica la economía de reparto.
Con las misiones y otros mecanismos de reparto, se inicia esa especie de telaraña tejida por quien gobierna, buscando saciar por su medio el voraz apetito de poder.
Siendo la telaraña un instrumento que tiene como función atrapar aquello que alimenta a quien la teje. Este, atrapa entre sus redes las necesidades vitales de la población, manipulándolas de tal manera que le permite controlar la voluntad de quienes la padecen. Este gobernante que se autodefine como socialista, protector de los pobres y abanderado de la justicia social, sólo ha demostrados ser una manipulador: aunque parezca paradójico, las necesidades del pueblo en los sectores más marginados, han sido la fuente de su fortaleza, los cimientos para mantenerse en el poder.
Utilizando como apalancamiento el ingreso del petróleo se ha permitido distorsionar la función del Gobierno-Estado, la imagen de este a sido sustituida por la de Presidente-Comandante o Comandante en jefe. Esta figura superpuesta a la institucional es la que se presenta como benefactora de sus seguidores.
Este apalancamiento le permite crear un hegemonía comunicacional, estatizar el sector productivos, claves para su proyecto, atacar la empresa privada y reciclar una y otra vez lo males de la llamada cuarta república.
De esta manera nace la Venezuela Virtual, una Venezuela en donde se gerencia a través de cadenas presidenciales, en donde se anuncian proyectos y mas proyectos, en donde la inseguridad es una sensación, el desempleo no existe, el control de cambio es indispensable para protegerse de los llamados apátridas, la educación y la salud son de las mejores del mundo.
Es así como, un gran numero de venezolanos creen, están convencidos de que el país va hacia delante, en lo político, con la mejor constitución del mundo, en lo social, con las misiones y, en lo económico con el logro de un precio justo para el petróleo. Es, en esta forma de hacer política en donde la frase, origen de esta reflexión tiene vigencia. ¨En política, lo importante no es lo que se ha hecho sino lo que la gente cree que se ha hecho¨.
En el ahora los problemas del país no solo son los mismos que existían en el 98 sino que estos se han profundizado, luego de 14 años de mal gobierno y con un precio del petróleo que el los últimos años se ha mantenido en un promedio de US$ 100,00 por barril, la deuda esta en aproximadamente en US$ 130 mil millones.
En la última publicación del Instituto Nacional de Estadística (INE) nos indica los siguiente:
Desempleo 7,9%
Empleos Públicos 18,29
Empleo Formal Privado 34,97
Empleo Informal Privado 38,84
Es importante que tengan presente que en la definición de empleo informal privado contiene, desde una persona que en un lapso de tiempo logro hacer algún tipo de trabajo, pasando por las personas que están en un semáforo vendiendo: lotería, periódico o cualquier baratija, hasta los llamados buhoneros que son aquello que se ganan la vida en el llamado comercio informal. Sin embargo lo que el gobierno exhibe es el 7.9% de desempleo y completa “Estamos mejor que muchos países, incluyendo EEUU y Europa¨.
Ustedes y yo sabemos que los altibajos en los precios de petróleo no dependen de gobierno alguno, así mismo estará de acuerdo con migo que Venezuela, hoy más que nunca depende del ingreso del petróleo, en función de esto ¿que sentido tiene comparar el Producto interno Bruto (PIB) existente en el 98 con un petróleo a US$ 8,00 con el Producto Interno Bruto actual con un Petróleo a US$ 105,00.? La repuesta no es otra que el engaño, la mentira, la confusión, acciones con las cuales se ha venido alimentando la Venezuela Virtual, esa que sólo existe en las cadenas, medios del Estado y vallas publicitarias.(Vea la investigación de la agencia Reuters http://elimpulso.com/articulo/reuters-fonden-la-caja-negra-de-hugo-chavez-1-de-3#.UGcyrKTj4so )
Luego de 14 años las únicas obras que se pueden ver en Venezuela, son esas obra que heredamos de la llamada cuarta república, lo demás es solo esa forma de hacer “política” haciendo de ésta, un nido de mentiras y mentirosos, de embaucados y embaucadores.
Debe estar conectado para enviar un comentario.